El verano es la época del año que usamos calzado para piscina y playa que puede afectar a la biomecánica del pie.
El calzado muy plano y poco sujeto puede provocar inestabilidad en el pie y problemas musculares derivados de su uso.
Un zapato muy inestable o con poca sujección al pie aumenta el riesgo de estiramiento o rotura de ligamentos en una mala pisada ( esguince), especialmente en terrenos irregulares.
Las tendinitis o inflamación de tendones de músculos como los peroneos o extensor de los dedos son muy comunes en esta época debido a una excesiva solicitación muscular.
Cuidado también con las suelas finas que recalientan el pie y favorecen que el arco del pie esté más caído sin amortiguación lo que favorece cuadros de fascitis en el pie.
Consejos para evitar lesiones este verano:
🔹️Si vas a la playa o piscina, utiliza chanclas con suela antideslizante y con tiras.
🔹️Si vas a caminar o hacer senderismo, utiliza calzado cerrado para estabilizar el pie.
🔹️No realizar deporte con chanclas o sandalias.
🔹️ Usar calzado con un poco de tacón ( 3-4 cm)
🔹️Realiza un programa de refuerzo de la musculatura intrínseca del pie con gomas o superficies inestables.